El Bugatti Veyron, con 1001 CV, una velocidad máxima de 407 km/h y 1250Nm de par motor, ya era uno de los deportivos más radicales de todos los tiempos. Sin embargo, la marca franco-italiana ha dado una vuelta más de tuerca a su motor 8.0 W16 quad-turbo para aumentar la cifra de potencia hasta unos impresionantes 1200 CV y 1500 Nm de par. Con esta mecánica, y una dieta a base de fibra de carbono, el Bugatti Veyron 16.4 Super Sport se ha convertido en el coche de calle más rápido del mundo, homologando una velocidad máxima de 431 km/h.

Un equipo del Libro Guinness de los Récords estuvo presente en el circuito de Volkswagen en Ehra-Lessien (Alemania), donde el piloto Pierre Henri Raphanel consiguió un registro de 434,211 km/h el pasado mes de julio. Una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,5 segundos o de 0 a 300 dm/h en torno a 15 segundos son otras muestras de su increible potencial.

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